Inquieta y amante del buen flamenco, Rocio Márquez lleva más de una década demostrando el porque ganó la Lámpara Minera en 2008 en su tierra. La onubense es un claro referente y figura generacional consolidada de la ´nueva voz del cante jondo´.
Este viaje musical le servido para conquistar templos como el Teatro Real de Madrid o la Filarmónica de París defendiendo un flamenco heterodoxo a través de ´performance´ junto a artístas de la talla de Jorge Drexler, Carmen Linares, Kiko Veneno, Christina Rosenvinge o Refree.