´Ay, Galván, Galván, hijo y nieto de Galvanes, de cómicos, de vagabundos. No reniegues de tus ancentros...´, Don Arturo y Carlos Galván reciben en un café musical camino de un viaje itinerante por la Mancha al hijo y nieto tras 17 años de ausencias **.
Así comienza ´El viaje a ninguna parte´ entre amores y desamores, deseos, frustraciones, trabajo, hambre y hambre de triunfo, una defensa a ultranza y homenaje a la profesión del cómico a través del teatro.