JUAN JOSÉ [TEATRO]... Drama lírico, entre penas,celos y venganza.

La escena recupera para siempre el drama lírico popular del maestro Pablo Sorozabal tras 48 años de silencio, una estupenda composición que ha estado guardado con sigilo esperando su oportunidad. Así llega, Juan José, con dos intentos previos fallidos para el estreno en éste periodo, es ahora cuando el Teatro de la Zarzuela nos trae el estreno absoluto de la versión escénica.

Considerada por el propio autor como su mejor obra, fué estrenada en modo concierto en 2009 en su San Sebastián natal, una partitura convertida en ´su´ obsesión durante todo éste tiempo, y que está basado en una obra de Joaquín Dicenta estrenada en el Teatro de la Comedia a finales del siglo XIX.

Las actitudes del ser humano son protagonistas en ésta ´ópera´ cargado de pesimismo vital en grado de desesperación y derroche de crueldad, violencia y tragedia, una problemática social que se asemeja a la cruda realidad del momento actual de la sociedad, donde aflora la miseria, paro, incultura, violencia machista o deshaucios.

La historia de ´Juan José´ nos lleva a los barrios bajos y humildes del Madrid desesperado, donde circula la marginalidad en grado máximo, reina la miseria y el analfabetismo, y los seres que allí habitan carecen de lo básico, de lo imprescindible, dominado por la tremenda injusticia social, que no son capaces de reflexionar sobre sus causas, y lo peor de todo, son conscientes de que no hay salida.

... no es posible soportar en silencio la conducta de un gobierno que viola los derechos del ciudadano, hora es ya de que el pueblo proteste y salga a la defensa de la libertá y de la patria... relata leyendo pausadamente y con dificultades, Perico, encima de un velador, con el que se inicia la escena en el interior de una triste Taberna.

Todos aceptan su desgracia, su incultura, su manera de vivir... así deambulan Juan José y Rosa, sus principales protagonistas, una historia envuelta entre penas, celos y deseos de venganza, obcecado por el amor ciego dependiente, machista y enfermizo que siente él hacia ella,

Personajes primitivos que aparecen en escena y que arrastran a un abismo atroz, la situación desesperada con la que conviven hasta el final, rodeado de una escenografía lúgubre y cargado de podredumbre.

Fotografías, cortesía de Fernando Marcos.

La puesta en escena nos muestra una tristeza ambiental de un Madrid gris donde los individuos se mueven con soltura en los tres actos, la música que planteó Sorozabal es densa e intensa, bien interpretada por la Orquesta de la Comunidad de Madrid bajo la batuta de su director, Miguel Angel Gómez, los decorados son mínimos y cargados de simbolismo para mostrar el entorno en que se mueve la escena, el vestuario es soberbio en su expresión y la iluminación concisa en cada acto.

Las voces de sus actores representan sonidos muy alejados de ser antihéroes, pero que registran con una excelsa labor lo que Sorozabal quiso plasmar, una ópera dura y critica con la sociedad de la época.

Bien vale una espera, si el resultado es el deseado a titulo póstumo por su autor, el maestro Sorozabal y por el  bien reconocido, director de éscena, Jose Carlos Plaza; y sobre todo, gracias al Teatro de la Zarzuela, Juan José toma contacto con los escenarios de forma contundente en ésta nueva temporada lírica.

Elenco: Carmen Solís, Jose Ángel Ódena, Silvia Vázquez, Milagros Martín, Antonio Gandía, Ruben Amoretti, Ivo Stanchez, Nestor Losán, Lorenzo Moncloa, Ricardo Muñiz. Dirección escénica: Jose Carlos Plaza Dirección musical: Miguel Ángel Gómez a cargo de la Orquesta de la Comunidad de Madrid. Escenografía e iluminación: Paco Leal Vestuario: Pedro Moreno